¿Sabíais que el acceso al agua potable está recogido como un derecho humano, más allá de una simple necesidad básica desde el año 2002?
En ese año, el Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales en su Observación General no 15 establecía que “el agua es un recurso natural limitado, y un bien público fundamental para la vida y la salud. El derecho humano al agua potable es indispensable para vivir dignamente, y condición previa para la realización de los otros derechos humanos…”
Se necesita una cantidad adecuada de agua por persona y por día, que la OrganizaciónMundialde la Salud (OMS) fija en 20 litrospor persona y por día. Esta cantidad representa menos del 1% del agua dulce que actualmente usamos, por tanto, el gran reto está en conseguir que esa agua llegue a todos, es decir: el acceso al agua potable.
Agua y salud: Las enfermedades relacionadas con la ingesta de agua de mala calidad causan más de tres millones de muertes al año. 4.000 niños y niñas menores de 5 años mueren al año por diarrea, una muerte fácilmente evitable.
Agua, educación y género: Las mujeres y las niñas suelen ser las encargadas de ir a buscar el agua en multitud de comunidades. Llegan a caminar una media de cinco horas diarias hasta la fuente o reserva más cercana. La OMS considera accesible el agua que esta a una distancia de trayecto total de1 km, entre ida y vuelta, desde la vivienda, la escuela o el puesto de trabajo, o a menos de treinta minutos de tiempo global. Ello provoca un elevadísimo absentismo escolar en las niñas, y la imposibilidad
para las mujeres de realizar otras actividades productivas que les permitan salir de la pobreza y conquistar su autonomía.
¿Quieres saber más? Mira la documentación de la Campaña África cuestión de vida